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jueves, 30 de agosto de 2012

CNOP: DE LA NOMEMKLATURA A LA ENCRUCIJADA
Daniel Castro Jiménez

En 1992 a la caída de Salvador Neme Castillo y después de casi 3 décadas de relevos tranquilos en la CNOP mediante la designación de dirigencias institucionales, el poderoso sector popular se perfiló como el principal detonante de candidaturas, pactos y acuerdos políticos desde y con el gobierno.
La razón fue sencilla, México y sus estados entraron a la urbanización de sus estructuras dejando a un lado el voto verde que durante muchos años dio victorias al PRI; el gobierno   consideró  a este sector, como aliado a sus proyectos.
                                                                    LAS HERIDAS
En 1992, la verticalidad de una dirigencia  que perfilaba a Luis Donaldo Colosio Murrieta como el aspirante a suceder a Carlos Salinas de Gortari, puso en la mesa de la discusión la desaparición de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP), sector  de donde surgió desde 1988, la famosa cantera que se opuso a la aceptación del Liberalismo Social en los principios o doctrina básica del tricolor.
En Tabasco, María de los Angeles Frías Sánchez, dirigente de la CNOP impulsada por el gobierno de Salvador Neme Castillo en 1991, no encajó en el proyecto de transición que los neomadracistas – aliados a Colosio- comenzaron a  operar desde Tabasco con Roberto Madrazo Pintado a la cabeza.
Reunidos en la Secretaria de Gobierno, el entonces Presidente del PRI en la entidad Humberto Mayans Canabal y el Secretario de Gobierno Juan José Rodríguez Prats, renunciaron a Frías Sánchez y pactaron enviar a la dirigencia estatal de la CNOP al empresario Abderraman García Ruíz,  primo de Ulises Ruíz, principal asesor político del régimen neorobertista y gente cercana al exgobernador de Quintana Roo; David Gustavo Gutiérrez Ruíz.
La tarea de Abderramán era sencilla: mantener inactivo al sector popular, hasta lograr que el proyecto de Colosio – que patrocinó el nacimiento del Movimiento Territorial, para sustituir  a la CNOP- se hiciera efectivo.
                                                         LA NOMENkLATURA

Sin embargo el ascenso de García Ruíz, a la sede cenopista no fue sencilla.
María de los Angeles Frías Sánchez, dirigente saliente, pertenecía al primer cirulo de poder del “Nemismo” que mantenía las intenciones de resistir políticamente la llegada de los neorobertistas a Tabasco.Pese a que las instrucciones de Neme, habían sido otras.
Los “nemistas” traían la espina clavada respecto a la destitución de Don Salvador (Q.E.P.D) y culpaban tanto a Manuel Gurría, como a Roberto Madrazo y el mismo Humberto Mayans Canabal, como los principales actores de esa dimisión.
“Machangle” fue la operadora de la llamada “nomenklatura” en la CNOP que desde 1992, está presente en todas las renovaciones de sus dirigencias.
La nominación de Abderraman García Ruíz no se llevó a efecto en marzo de 1992, sino culminó 2 meses después.
 En ese entonces, los cenopistas  Frias Sánchez – dirigente saliente--; Pedro Gutiérrez Gutiérrez – Coordinador Ejecutivo-; Melvin Izquierdo Torres—coordinador de gremios-; Manuel Andrade Díaz –dirigente del FJR-; Gustavo de la Torre Zurita – aspirante a la dirigencia de los Propietarios Rurales, entre otros; postularon en Asamblea Estatal a Manuel Rodríguez Gallegos, como Secretario General Interino de a Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP).
 Su nombramiento, desconocido por el CEN de la CNOP  sin embargo, solo duró mes y medio.
Luego de una serie de acuerdos políticos, Abderraman se sentó en la silla de Paseo Tabasco 218, teniendo como aliado al sector transportista que lo cobijó mediante la postulación de su líder Carlos Fernando Rosas Cortes, como Coordinador Ejecutivo.
Abderraman logró su objetivo, fue el responsable de aceptar el cambio de nombre de CNOP a UNE “ Ciudadanos en movimiento”, nominación que sólo duró 2 años y fue cambiada a Frente Nacional de Organizaciones Y Ciudadanos (FNOC) que aprobó otro de los dirigentes incómodos que han pasado por la sede de Paseo Tabasco: Pedro Javier Resendez Medina, a quien la nomenklatura bautizó como el mote de “Consuegro Incómodo”.
Teniendo a Resendez como dirigente, la nomenklatura operó de nueva cuenta  en 1994 y alentó la toma de las instalaciones un mes antes de tomar protesta como diputado local por Teapa. El motivo  en esa ocasión fue financiero; Resendez Medina  había desaparecido los aguinaldos y pagos quincenales de una veintena de oficinistas.
La historia del sector desde entonces ha sido apasionante. La Nomemklatura del  92 arrojó a todos sus integrantes – Salvo Andrade que se saltó y fue gobernador-  a la dirigencia de la CNOP  estatal.
                                                            VERSION 2012: LA CRISIS DEL PRI
El ultimo censo que la CNOP realizó para obtener un fichero que determinase cuantas organizaciones la constituían, arrojó un total de 514 organizaciones adherentes, entre Uniones, cooperativas, pescadores, ambulantes, locatarios, transportistas, profesionistas y hasta cibernautas.
La cantera del sector contempla una afiliación cercana a los 70 mil seguidores directos, pese a que en los últimos 10 años, perdió la mayoría de los sindicatos adheridos a la FSTSE, además del SNTE y el sindicato de Burócratas.
Todos ellos o en su gran mayoría, se encuentran ajenos al proceso de renovación que se ha complicado con la aparición de nueva cuenta de la nomenklatura cenopista que lleva la intención de repetir sus acuerdos pactados desde el 92.
Sólo que el escenario político, no es el mismo. Y su participación  en esta ocasión, se convierte en una “celada” mas que un movimiento de resistencia o de corrientes políticas.
Vamos por partes:
La aparición de Pedro Gutiérrez Gutiérrez y Gustavo de la Torre Zurita, apoyando a la disidencia cenopista tiene aristas que hay que pulir en su justa dimensión.
El ex diputado local forma parte de la llamada ala dura del PRI que en 2003, intentó reprobar la cuenta pública de Andrés Granier Melo y frenar así su  camino a la gubernatura
Pedro difundió en ese entonces que el dictamen del “Químico” presentaba  un faltante de 35 millones de pesos y  obras irregulares por un millón más.
Gutiérrez Gutiérrez sin embargo tenía como compañero de legislatura al controvertido Aquiles Dominguez Cerino – Jefe inmediato hoy de Manuel Rodriguez Gallegos- y siendo diputado por el PRD  fue el salvador de la cuenta pública de Granier, al votar a favor de su aprobación.
El caso de Gustavo de la Torre Zurita, no es tampoco ajeno a la apreciación antigranierista.
De la Torre Zurita en 2009, acudió a un convivio organizado por el exgobernador Manuel Andrade Díaz.
Ahí, de acuerdo a un video que circuló dos días después, recibió el respaldo de los Andradistas para buscar la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI); Granier, lo consideró una traición a su proyecto y le aceptó su renuncia al cargo de dirigente del sector popular en julio del 2009, fue sustituido por Félix Eladio Sarracino Acuña en agosto del mismo año.
En 2012, Gustavo de la Torre fue el coordinador de la campaña interna del PRI a la candidatura al gobierno de Georgina Trujillo Zentella.
Al contexto  político se suma la participación de Francisco Herrera León, presidente del CDE del PRI y Adrián Hernández Balboa, coordinador de campaña de Jesús Alí de la Torre, situación que  revela intereses extrasectoriales por reventar el proceso de renovación interna y postular finalmente a Balboa como propuesta del grupo para solucionar el conflicto.
Todos ellos, distanciados con el aun gobernador Andrés Granier Melo.
 De este escenario  surge la primera lectura en la versión 2012 del relevo cenopista.
La triada que postuló a Isidro Mosqueda Jiménez, como “secretario general interino” – María de los Angeles Frías Sanchez, Gustavo de la Torre Zurita y Pedro Gutierrez- no reconocen al gobernador Andrés Granier Melo, como el primer priista de Tabasco o en su caso no lo valoran como interlocutor para reorganizar a la CNOP tabasqueña.
La intención expresa de grupo es sacar un candidato a la dirigencia estatal del PRI, que recaería en la figura de Pedro Gutiérrez Gutiérrez y /o Gustavo de la Torre Zurita.
Y aquí es donde la puerca torció el rabo.
Félix Eladio Sarracino Acuña, ex diputado local y ex secretario técnico del PRI en Tabasco, culminó su periodo estatutario el pasado 15 de agosto y anunció que buscara su postulación a la dirigencia estatal del tricolor.
Sarracino Acuña, se enfrentó durante su gestión como líder estatal de la CNOP, al grupo de Jesus Alí de la Torre, que en dos ocasiones -por la vía de Adrián Hernández Balboa- intentó renunciarlo del sector popular.
Más aún, como de todos es conocido, Sarracino Acuña impugnó hasta en dos ocasiones la postulación de Francisco Herrera León , presidente del CDE del PRI en Tabasco, como candidato a diputado local plurinominal, proceso donde el TRIFE finalmente le dio la razón.
Luego entonces, el proceso de renovación de la CNOP en Tabasco, cambia su sentido estricto y se coloca en una seria encrucijada en la que un ala del priísmo ha perdido la brújula por una simple y sencilla razón:  los priístas  están en proceso de confusión extrema ante la falta de un liderazgo estatal que se les complicó por no aceptar ya como primer priísta a Granier Melo.
Sin embargo el escenario que se está presentando en Tabasco después que el PRI perdió la Gubernatura el pasado primero de julio, no es ajeno a lo que ha pasado en otros estados donde mantiene el mismo problema.
En estados como Oaxaca, Puebla, Jalisco, Guanajuato, Guerrero, Aguascalientes y Baja California, el PRI tocó fondo y no han encontrado la fórmula que les permita agruparse para comenzar a ganar elecciones locales.
En Puebla  por citar un ejemplo, los priístas poblanos siguen enfrentados en un solo pleito: el exgobernador Mario Marín lucha por mantener presencia política, en tanto el ex candidato perdedor Javier López Zavala, pugna por que no lo logre. Ambos, eran aliados antes de perder la elección local.
¿Le suena este comentario conocido, estimado lector?
Es un escenario natural válgase la expresión, por el futuro control político del CDE y sus sectores en una primera intención.
Las corrientes internas opuestas a la que sirve Herrera León,  han abierto espacios a su política de confrontación, lo han dejado “ser” también por otra sencilla razón: la descomposición total del partido, es una factura que debe cargarse al grupo que perdió la gubernatura y…a sus aliados.
Por ello, la confrontación en la CNOP tabasqueña es un escenario difícil de sortear en este proceso de renovación.
Para  los ajedrecistas y para los políticos, “la celada” es una trampa o golpe táctico que se puede esperar del contrincante en cualquier momento, consiste en una jugada o combinación que proporciona una ventaja material o posicional, ofertando piezas al contrario.
Generalmente, si no se cae en este tipo de trampa, el bando atacado no sufre ningún tipo de pérdida y puede incluso obtener mejor posición.
Y ese es el escenario real que guarda el conflicto “interno” en la CNOP.
Primero: marca las serias diferencias que existen entre el gobernador en funciones Andrés Granier Melo y el candidato perdedor Jesús Alí de la Torre.
Segundo: El control del PRI no está en manos de Francisco Herrera León –quien dejará de ser Senador a partir del primero de septiembre-, si no de los grupos, ex gobernadores, ex aspirantes a la gubernatura que abrirán una primera trinchera, en los procesos de renovación de sus sectores; para entrar de lleno a la lucha por colocar a sus piezas al frente del CDE del tricolor.
Tercero: la Nomenklatura de la CNOP está por culminar su ciclo, su participación en esta ocasión es protagónica porque se les olvidó construir proyectos, cuadros y desde luego impulsar prospectos para dar la lucha una vez que todos ya han sido dirigentes del sector.
Cuarto: Adrián Hernández Balboa, es el proyecto real del grupo que impulsa la creación de una corriente alterna en la CNOP y por ello, les conviene reventar la elección. Balboa, pretende desde allí, buscar la postulación en 2015 como candidato a la Presidencia Municipal de Centro.
Quinto: El dirigente nacional de la CNOP Emilio Gamboa Patrón, dejará el sector a partir del primero de septiembre, fecha en que de acuerdo al librito, el proceso de renovación quedará en manos ya del equipo de Enrique Peña Nieto que se acomodará en el PRI y sus sectores a nivel nacional.
Sexto: Ni Chilo Mosqueda, ni Yenni Rodríguez Aguilar,  seguirán al frente de la CNOP en 2012.
Séptimo: Felix Eladio Sarracino Acuña, será candidato natural a la Presidencia del CDE del PRI en Tabasco.
Octavo: Pedro Gutiérrez Gutiérrez y Gustavo de la Torre Zurita buscarán, con el apoyo de Manuel Andrade uno y de Georgina Trujillo el otro,  la dirigencia estatal del PRI.
Noveno: Francisco Becerra Ocaña, por lógica elemental será el dirigente formal de la CNOP, con o sin el reconocimiento del PRI de Francisco Herrera León.
Décimo:  El PRI será oposición a partir del primero de enero de 2013 y corre el riesgo de llegar sin aliento a un proceso de adaptación política para el que actualmente no está preparado.



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