Asi Fue...

Chilo Mosqueda, y su salto al vacìo

Durante el proceso constitucional de 2006, en la que el PRI postuló al químico Andrés Granier Melo como su abanderado a la gubernatura, la dirigencia estatal del tricolor organizó una serie de “monitores” en medios, que llevaban la consigna de rebatir todos los argumentos que el PRD enviaba a programas de radio particularmente, para intentar ganar adeptos a favor de César Raúl Ojeda Zubieta.

Georgina Trujillo Zentella, presidente del CDE financió este llamado grupo de ciudadanos simpatizantes del PRI, que buscaron reflectores para ganar el debate ante los amarillos, sin necesidad de exponer, ni a la dirigencia del PRI, ni a su candidato al gobierno.

Uno de esos “monitores”, y con gran éxito, fue el controvertido dirigente de los “pochimovileros” Isidro Mosqueda Jiménez, exregidor de Balancan, ex coordinador de campaña de Agapito Domínguez Lacroix en Balancan e integrante vitalicio de la Juventud Popular Revolucionaria (JPR).

“Chilo” es un activista inquieto, que surge hoy en la cantera de la CNOP para quitarse la etiqueta de “activista” y dar el gran salto a las grandes ligas de la política choca.

Sin embargo, ¿Cuáles son los riesgos que corre un activista forjado en la línea del financiamiento?

Chilo Mosqueda, pertenece a una generación que encabezó en 1994, el expresidente del CDM del PRI Emilio Garduza Méndez.

Emilio dio ya el salto al vacio que pretende dar “chilo” Mosqueda y fue cobijado por el grupo político de Enrique Priego Oropeza, que lo hizo Director de Evaluación del Gobierno del Estado.

Otro de los activos surgidos de la cantera de la JPR, lo es Yenni Magdalena Rodríguez Aguilar, a quien Chilo postuló en 1997, para ser dirigente de los jóvenes de la CNOP.

Yenni también dio el salto al vacio en el 2000 y fue impulsada por el grupo político de Manuel Andrade Diaz, que la hizo diputada plurinominal.

La cantera del FJR ha dado cuadros que han sido cobijados por grupos de poder.

Mario Llergo comenzó con Gina Trujillo y terminó con Jesús Ali de la Torre.

Carlos Garrido Gular, operó siempre bajos las filas del “granierismo” y se mantiene vigente en esa corriente.

Jesús Díaz Méndez, es otro granierista cuyo “salto al vacìo” fue aterciopelado.

El gran problema de “chilo” Mosqueda en estos momentos de definición política, es que los dos grupos que mantienen el “control” político se encuentran enfrentados.

“Chilo” no es “chuchista” ni “granierista”.

No encaja -como proyecto– ni en las ligas de resistencia que mantiene en el estado Francisco Herrera León.

¿De que depende entonces su salto al vacío?

¿Del relevo de la CNOP?

Por lo pronto, Chilo, es para el PRI y su bitácora, un activista de tiempo completo, reclutado para dar la pelea al PRD.

Ya dio su salto al vacío ¿Quién lo arropa?