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lunes, 3 de junio de 2013


ARTURO NUÑEZ JIMENEZ: LA FARSA DE LA AUSTERIDAD
La cancelación de las obras para concluir la Torre Oncológica del Hospital “Juan Graham Casasus”, fue la primera  prueba que calificó el Programa de Austeridad del Gobierno de Arturo Nuñez como una farsa.
Amén de que representa otro lunar a los compromisos de campaña del gobernador del “cambio” a favor de la salud de los tabasqueños, exhibe la falta de imaginación y compromisos de un gabinete que sólo llegó a “calentar la silla,” por no tener ni idea de lo que representan sus funciones públicas y sólo administra Secretarías y Direcciones a la vieja usanza burocrática.
 A diferencia del Gobernador de Chihuahua Cesar Duarte que aplicó un plan de austeridad que incluyó la reducción de sueldos de funcionarios de primer nivel y que le permitirá a la administración local ahorrar mil millones de pesos -los cuales se recanalizarán al sector salud-, Nuñez solo autoriza que NO se incremente los salarios de sus funcionarios de primer nivel ( y de ÈL), más allá de los autorizados por el gobierno de Andrés Granier Melo en 2012.
 A diferencia del gobierno de Chihuahua que inició la venta de la cuarta parte de su flotilla de vehículos, y cambiará todos los de 8 cilindros por automotores compactos de 4, a fin de gastar menos combustible y ahorrar casi 100 millones de pesos en el 2013; El Gobierno de Tabasco, disfrazó un decreto de Austeridad, habilitando a la Secretaría de Administración y Finanzas la compra de vehículos que “justifiquen son indispensables para el cumplimiento de sus funciones”.
En Chiapas, por ejemplo la Legislatura local autorizó un ordenamiento que precisa que ningún funcionario de la administración pública estatal podrá devengar una remuneración mayor a la del gobernador, Manuel Velasco Coello, al que se le recortó en 50% del sueldo que percibe en la actualidad, restricción que aplicó a principios de 2013, excepto para el personal de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana y de la Procuraduría General de Justicia.
De acuerdo al Secretario de Salud, la culminación de la torre oncológica, requiere de 150 millones de pesos para su conclusión.
El gobierno de Tabasco, no ha precisado cuanto reducirá o ahorrará con su programa de austeridad y a donde va a ir a parar ese ahorro.
El decreto de austeridad de paso, alimenta la corrupción y el soborno en dependencias como Tránsito del Estado y Fiscalización porque el anular la cancelación de multas, da luz verde a oficiales e inspectores para cobrar a la mano sobornos y mordidas al por mayor.
 Más aún, para un gobernante los lujos culinarios son prioritarios a fin de conservar el gusto por la buena gastronomía.
Por ejemplo la “Lengua en Estofado” es un plato que al gobernador intangible le va bien.
El platillo es preparado especialmente por el galardonado Ernesto Aguilera Rodas, ganador del CHEF del año 2010 quien acude a la Quinta Grijalva a consentir al precursor del decreto de austeridad 2013.
Sólo un pequeño detallito se les ha pasado por alto, Aguilera Rodas es sobrino de Martha Lilia López Aguilera  y bueno las excentricidades culinarias pudiese estarle costando al pueblo de Tabasco un ojo de la cara cada que se le mueve el antojo al aniquilador de los “poderes fácticos”.
Nuñez encabeza pues, no sólo el gobierno del odio y la venganza, sino ahora de la farsa y la simulación.

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